Tiro penal (fútbol)
En fútbol, tiro penal, penal o penalti (en España), es una sanción técnica contemplada en la 14a regla de dicho deporte. Consiste en lanzar un tiro desde el punto penal ubicado a 11 metros (o 12 yardas) de la portería, y sólo con el guardameta del equipo defensor entre el tirador del penal y la portería. El penal es sancionado por el árbitro central del partido, cuando se produce una infracción o falta dentro del área grande.
Un tiro penal es realizado durante un juego normal. Tiros similares son realizados en una definición por penales
para generalmente determinar en un empate, qué equipo se clasifica a
una fase o gana un torneo. Estas definiciones no son parte de la regla
14 del tiro penal.
Historia
El tiro penal se creó en 1891
para evitar las situaciones en las que los jugadores impedían un gol
más que probable de sus rivales y no recibían más sanción que una falta.
En los primeros tiempos de su instauración, muchos porteros se quedaban
quietos dejando que sus rivales marcaran fácilmente, por considerar el
lanzamiento del tiro penal poco caballeroso.
La invención del tiro penal es acreditado al guardameta y empresario William McCrum en 1880 en Milford, Irlanda del Norte.1 La Irish Football Association presentó la idea a la International Football Association Board y finalmente, tras mucho debate, el organismo aprobó la propuesta el 2 de junio de 1891 para introducirse en la temporada 1891-92.
Concesión
Se concede un tiro penal cualquier falta sancionable con tiro libre directo
que se cometa dentro del área penal. Esto implica que el balón debe
estar en juego y se considera el lugar de la falta, y no la del balón,
debe producirse dentro del área penal. El árbitro debe hacer sonar su silbato y señalar al punto penal.
Procedimiento
Para el lanzamiento, debe identificarse al jugador que realizará el
tiro, colocándose el balón sobre el punto penal, situado a 11 metros
de la línea de gol. El portero del equipo sancionado debe situarse
sobre la línea de meta, entre los postes y bajo palos de frente al
ejecutor. Los otros jugadores deben permanecer en el campo de juego
detrás del punto penal (para no estar fuera de juego),
en el exterior del área penal y a 10 yardas (aproximadamente 9,15
metros) como mínimo de dicho punto hasta el momento del lanzamiento
(señalado en el semicirculo del área). El árbitro dará la señal para
ejecutar el penal al cumplirse la ubicación de los jugadores señalada.
El ejecutor que puede ser cualquier jugador que está en el campo y
que sea del equipo que no cometió la infracción. Se debe jugar el balón
hacia adelante con el pie. A partir de la puesta en movimiento del
balón, este estará en juego y el partido vuelve a jugarse normalmente.
El ejecutor podrá volverlo a tocar si el balón toma contacto con otro
jugador, lo que implica que, ante el rebote en un poste, el ejecutor no
podrá tocar directamente el balón, concediéndose tiro libre indirecto al
equipo rival si esto ocurre. Los otros jugadores solo podrán entrar en
el área después de que el balón sea pateado y se ponga en movimiento.
Infracciones a la regla
Si el tiro penal no es ejecutado correctamente por cometerse al menos
una infracción, el árbitro permitirá que se continúe la jugada y
actuará según el resultado del tiro y dependiendo de quién haya cometido
la infracción. Si la infracción es cometida por el equipo defensor, se
repite el tiro si el balón no entró en la meta. En caso de que el
ejecutor golpee mas de dos veces la pelota de manera voluntaria se
sancionarà tiro libre indirecto en favor del equipo contrario, si el
segundo golpe se da de manera fortuita el àrbitro deberà darle
continuidad al juego sea cual sea el resultado de la jugada. Si la
infraccion es cometida por el equipo atacante, se repite el tiro si el
balón entró en la portería, de otro modo se concede un tiro libre
indirecto a favor del equipo defensor. Siempre se repetirá el tiro si
ambos equipos cometen infracciones o si el balón toca o es tocado por un
objeto extraño al ser puesto en movimiento. La infracción más común es
"invadir el área": el ingreso al área por parte de un jugador que no es
el ejecutor, antes de ponerse en juego el balón. Otra infracción es el
acercamiento del arquero hacia el balón, reduciendo la posibilidad de
una conversión. Si no hay gol, el árbitro debe repetir el tiro ante un
"ostensible adelantamiento" del arquero.